La entrada en vigor de la Ley Orgánica 1/2025 ha transformado radicalmente el modo en que deben tramitarse los procesos civiles y mercantiles en España. Entre las reformas más significativas se encuentra el establecimiento del intento obligatorio de negociación previa —es decir, la exigencia de acudir a un MASC (Medio Adecuado de Solución de Controversias)— como requisito de procedibilidad para poder presentar una demanda. Este cambio impacta de lleno en los procedimientos de desahucio y desalojo, que tradicionalmente han derivado en litigios judiciales largos y emocionalmente difíciles para las partes, especialmente para quien se ve obligado a abandonar su vivienda o local.
La oferta vinculante confidencial: un MASC eficaz en procesos de desahucio
Dentro del abanico de mecanismos de resolución extrajudicial reconocidos por la Ley 1/2025, la oferta vinculante confidencial se presenta como el MASC más adecuado para resolver conflictos de desahucio. ¿Por qué? Porque cumple con todos los requisitos legales para ser considerado válido, garantiza la confidencialidad del proceso y, sobre todo, permite al arrendador iniciar una negociación de forma rápida y segura.
La clave está en su simplicidad: el arrendador o propietario puede realizar una oferta formal al ocupante, comprometiéndose a cumplir lo propuesto si la parte contraria lo acepta dentro del plazo establecido. Si no hay respuesta o ésta es negativa, basta con acreditar la remisión de la oferta para poder presentar la demanda judicial sin riesgo de inadmisión.
Este procedimiento no solo agiliza el acceso a la vía jurisdiccional en caso de que fracase la negociación, sino que también brinda una última oportunidad para evitar un litigio traumático. En muchos casos, los arrendatarios prefieren pactar una salida ordenada antes que enfrentarse a una intervención forzosa, que no solo puede resultar costosa, sino también estigmatizante.
Obligación legal de intentar un MASC antes de demandar
La nueva normativa establece de forma clara que el intento de resolución extrajudicial es obligatorio en los procedimientos de desahucio que se encuadran en los procesos declarativos verbales del Libro II de la Ley de Enjuiciamiento Civil. En estos procedimientos se incluyen los desahucios por impago de rentas, expiración del plazo del contrato o situaciones de precario, todos ellos muy frecuentes en la práctica inmobiliaria.
No basta con una mera voluntad de negociar: es imprescindible acreditar que se ha realizado una verdadera actividad negociadora. Esto implica haber contactado a la otra parte por medios que permitan constatar la recepción, la identidad del emisor y el contenido del mensaje, como burofax, correo certificado o plataformas digitales certificadas.
En este sentido, el uso de plataformas como ofertasvinculantes.es permite cumplir con este requisito de forma automatizada, segura y perfectamente documentada. Además, la ley reconoce explícitamente que el uso de una oferta vinculante confidencial interrumpe la prescripción y suspende la caducidad de las acciones, lo cual añade un valor jurídico estratégico para las partes implicadas.
Menos confrontación, más soluciones sostenibles
El mayor valor de los MASC no reside sólo en evitar pleitos innecesarios, sino en transformar la lógica del conflicto judicial por la de una solución colaborativa. En un desahucio, las tensiones emocionales, sociales y económicas son enormes. La posibilidad de llegar a un pacto, por ejemplo, fijando un plazo razonable para el desalojo o acordando el pago fraccionado de cantidades pendientes, puede aliviar significativamente la carga para ambas partes.
Para los arrendadores, el uso del MASC, especialmente la oferta vinculante, no sólo representa una forma legal de cumplir con la nueva exigencia procesal, sino también un ahorro en costes, tiempo y desgaste personal. Para los ocupantes, implica la posibilidad de tener voz y margen para negociar una salida digna, evitando la intervención de las fuerzas judiciales y las consecuencias personales que esto conlleva.
Además, la confidencialidad de la oferta vinculante garantiza que ningún contenido de la negociación sea usado en juicio, lo que genera un entorno de mayor confianza para las partes, salvo que decidan, ambas y de forma expresa, dispensarse de esa confidencialidad.
En nuestra plataforma caben ambas opciones con un sólo clic y, lo que es mejor, si luego en el trámite de costas procesales, donde ya no existe la confidencialidad, quieres aportar la Oferta Vinculante que en su día fue confidencial, podrás hacerlo sin problema, con otro clic..